Hace unos días, mientras releía El Inmortal de Jorge Luis Borges, escribí en el margen de la página 19, lo que debería ser el primer versículo del Génesis de las más de 900 versiones del antiguo testamento distribuidas por todo el mundo, porque de la Nada, nada se puede crear y si no había nada, tampoco había un creador. Ergo,

“En el principio era el Caos, entonces el número se hizo palabra para ordenar el Cosmos intemporal e infinito…”

(ASV_3/08/2020 Nota al margen, en El Inmortal de J.L.Borges)

Después de más de cuatro décadas de estar investigando en Astrología, resulta inevitable constatar secuencias y patrones de números en los ciclos cósmicos, como la conocida Ley de Johann Titus – Johann Bode (c. 1766), según la que la distancia de los planetas al Sol, responde a una fórmula: a=(n+4)/10, siendo n=0,3,6,12,24,… (cada valor el doble del anterior) o en la Naturaleza, la conocida serie de números de Fibonacci:

{\displaystyle 0,1,1,2,3,5,8,13,21,34,55,89,144,233,377,610,987,1597\ldots \,}
Serie de Fibonacci

Esta sucesión de números describe un orden implícito en todas las estructuras naturales, constituyendo la base de la sección áurea a partir del número fi (\phi ) deleite de matemáticos y estudiosos que no se detienen en la búsqueda de códigos, fórmulas y leyes. Dentro de éstas, hay un patrón descrito a finales del Siglo XIX por Simon Newcomb y que fue desarrollado por el Ingeniero Eléctrico Frank Benford, en una desconcertante secuencia númerica conocida como la Ley de Benford, cuyo alcance abarca prácticamente todas las actividades de la civilización…(Demografía, elecciones, bolsa de valores, comportamiento de mercados, verificación de fraudes, impuestos, leyes naturales, etc.) Su aplicación en el análisis del comportamiento de redes sociales ha sido determinante para determinar la creciente epidemia de noticias falsas o fake news, falsificación de imágenes (la degradación de las copias en relación con el original responde al patrón de esta Ley).

Secuencia de la Ley de Benford

La aplicación de estos principios no se limita a las actividades humanas. Sorprendentemente, una gran cantidad de procesos naturales, también siguen rigurosamente esta secuencia de números, como si nos reiterara el principio que los hermetistas han sostenido por siglos: El Todo es Mente y la mente obedece a los números…